Mini tarta de queso con jengibre
Una reinterpretación del más clásico de los pasteles americanos que añade jengibre y reduce el tamaño.
Esta receta es para un postre delicioso, pero hecha con un ingrediente muy saludable: ¡el jengibre! Una especia cada vez más popular en la cocina por sus propiedades beneficiosas.
La tarta de queso es un postre típico americano y la receta original proporciona una base elaborada con las típicas galletas Digestivas y queso crema para untar (New York Cheesecake). Se presta a numerosas variaciones, como las de calabaza, nutella, tiramisú y yogur.
¿Por qué no hacerlo un poco más aromático y original con la adición de jengibre? Esta raíz tiene poderes digestivos, antiinflamatorios y antináuseos y se recomienda tomarla todos los días; cura los resfriados y reduce el colesterol y la presión arterial, además de hacer cualquier plato más sabroso y sabroso. Un toque picante (¡y saludable!) En la dulzura de este pastel elaborado en Estados Unidos.
- Rendimiento: 6 personas atendidas
- Preparación: 40 minutos
- Cocinar: 10 minutos
Ingredientes
- 180 gramos de galletas digestivas
- 375 gramos de queso para untar
- 80 gramos de mantequilla blanda
- 80 gramos de nata para montar
- 120 gramos de yogur blanco
- 1 pieza de jengibre fresco de unos 4,5 cm
- 120 gramos de almendras peladas
- 200 gramos de fresas frescas
- 100 gramos de azúcar granulada
- 30 gramos de azúcar glass
- 1 hoja de cola de pescado
Preparación
Prepare todos los ingredientes en la superficie de trabajo.
Toma las galletas y mételas en una batidora hasta obtener una consistencia arenosa.
Si quedan trozos de galleta, no importa.Agrega la mantequilla, después de 10 segundos en el microondas, a las galletas.
Mezclar bien.
Rellena las bases de unos aros de repostería.
También puedes usar tazas o vasos.Mezclar el queso, el azúcar granulada y el yogur.
Batir la nata por separado y añadirla.
Derretir la cola de pescado y agregarla a la mezcla.Agrega el jengibre rallado y mezcla bien.
Pon la mezcla en los aros de repostería.
Refrigere por al menos 4 horas.Lavar, limpiar y cortar las fresas en trozos.
Ponlos en una cacerola a fuego lento.Después de que las fresas hayan expulsado su agua, agregue el jugo de 1 limón y el azúcar glass y termine de cocinar hasta que las fresas estén completamente despulpadas.
Tostar las almendras peladas.
Después de 4 horas (como mínimo) en el frigorífico, añadir el coulisse de fresa y las almendras picadas en trozos grandes.