Cómo ventilar la casa en invierno: algunos consejos para evitar la formación de moho y desperdicio de energía

Cómo y cuándo ventilar la casa: pequeños consejos para evitar el moho y el derroche de energía

Cómo ventilar la casa en invierno: algunos consejos para evitar la formación de moho y desperdicio de energía

Cómo y cuándo ventilar la casa: pequeños consejos para evitar el moho y el derroche de energía.

La calidad del aire en el interior de la casa es importante para el bienestar de todas las personas que viven en su interior, pero también es importante para la protección del edificio para evitar la formación de moho en las paredes y / o armarios.

Ventilar la casa significa reemplazar el aire presente en una habitación por aire limpio proveniente del exterior . Una habitación de tamaño normal con ventana necesita unos minutos para que el aire presente sea reemplazado por el aire exterior. Mientras que una casa entera se puede ventilar en menos de 10 minutos si todas las ventanas se abren al mismo tiempo.

¡Advertencia! Para ventilar la casa no es necesario dejar abiertas las ventanas y puertas durante todo un día. De hecho, dejar salir el aire de una habitación durante demasiado tiempo puede provocar un aumento del 25% en los costes de calefacción.

De lo contrario, no ventilar la casa en los meses de invierno significa que no se libera el exceso de humedad presente en el aire, provocando en consecuencia un aumento del vapor de agua que con el tiempo puede provocar la formación de condensaciones y moho. Para prevenir la formación de moho y evitar el derroche de energía, es fundamental ventilar todos los días , en cualquier condición climática.

Mejores métodos

La mejor forma de ventilar la casa en la temporada de invierno es abrir varias ventanas para crear una corriente de aire durante unos 5 minutos varias veces al día si es necesario. De esta forma tendrás un cambio completo de aire y esto garantizará el mínimo desperdicio de energía.

Las estancias de la casa en las que se produce una mayor cantidad de vapor de agua son el baño y la cocina, ambos deben ser ventilados con mayor frecuencia, especialmente después de una ducha en el baño y al cocinar alimentos en las cocinas. Este último debe estar equipado con una campana extractora en el exterior.

Por tanto, existen dos métodos de ventilación:

• Ventilación manual

• Ventilación mecánica controlada

La ventilación manual es la ventilación mediante la apertura de las ventanas creando corrientes de aire durante unos minutos, mientras que no se recomienda la única apertura de las ventanas prolongada en el tiempo ya que también bajaría la temperatura superficial de paredes y muebles.

La ventilación mecánica es posible mediante la instalación de un dispositivo que toma el aire exterior y lo limpia microfiltrado y expulsa el defecto, evitando así cualquier pérdida de energía y garantizando la máxima salubridad atmosférica en cada estancia. Este sistema está controlado por una centralita y se utiliza en hogares de última generación.