Achicoria roja frita

Aquí tienes una receta fácil, rápida y muy versátil. Con sabor a frito, se puede servir como guarnición, para acompañar picatostes o como receta básica para otras preparaciones.

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Achicoria roja frita

Aquí tienes una receta fácil, rápida y muy versátil. Con sabor a frito, se puede servir como guarnición, para acompañar picatostes o como receta básica para otras preparaciones.

La achicoria en sartén es una receta fácil, rápida y muy versátil. Aromatizado con cebolla o puerro ligeramente frito, se puede servir como guarnición, para acompañar crutones o como receta básica para otras preparaciones: un risotto, un primer plato o para rellenar un sabroso pastel.

Hay tres variedades de achicoria para elegir: la achicoria roja caracterizada por hojas de color rojo oscuro, la abigarrada con hojas de color verde claro con vetas rojas y blancas. La achicoria, según el período en que se recolecta, se define como "temprana" o "tardía ". El tipo temprano se caracteriza por un sabor particularmente dulce mientras que el tardío tiene un regusto amargo.

Es una de esas verduras con buenas propiedades beneficiosas para la salud de nuestro organismo. En primer lugar, tiene propiedades depurativas y, gracias al alto contenido de agua, la presencia de fibras y principios amargos, favorece la digestión y el buen funcionamiento del intestino. Las fibras presentes en la achicoria tienen la propiedad de retener los azúcares presentes en la sangre y por ello la achicoria se recomienda para sujetos que padecen diabetes tipo 2. En este sentido también hay que destacar que esta ensalada contiene insulina, sustancia que ayuda al cuerpo para controlar y regular los niveles de azúcar en sangre.

Según estudios recientes realizados en la Universidad de Urbino, parece que la achicoria roja contiene muchos más antioxidantes que los alimentos más famosos por esta propiedad como los arándanos y las pasas. Gracias a esta característica ralentiza el envejecimiento celular, previene la aparición de algunos tipos de cáncer, especialmente en el intestino y contrarresta la actividad de los radicales libres. No solo. La piel también se beneficia de la presencia de antioxidantes, manteniéndola joven por más tiempo.

En definitiva, con achicoria puedes preparar lo que quieras y es muy bueno para todo nuestro cuerpo. ¡Y luego solo tiene 14 Kcal por 100 gramos!

  • Rendimiento: 2 personas atendidas
  • Preparación: 2 minutos
  • Cocinar: 5 minutos

Ingredientes

  • 1 achicoria roja de Treviso
  • 1 cebolla
  • 1 cucharada de aceite de oliva
  • sal
  • pimienta negro

Preparación

  1. Tomar la achicoria, quitar las hojas exteriores dañadas y cortarla por la mitad a lo largo.
  2. Con un cuchillo, corte en forma de V y retírelo.
  3. Divida la achicoria nuevamente en dos partes y luego córtela en tiras.
  4. Mientras tanto, corta la cebolla finamente y añádela a una sartén de fondo grande con el aceite de oliva.
  5. Deja que la cebolla se sofría a fuego lento y cuando empiece a estar blanda añadir la achicoria.
  6. Agregue sal y cocine a fuego medio durante unos 5 minutos, revolviendo ocasionalmente.
  7. Sirva agregando un puñado de pimienta negra recién molida.