Papas fritas con pimentón

Deliciosas y sabrosas, y también mucho más saludables que las que están en bolsas: aquí se explica cómo hacer hojas de papa en casa. Chips de pimentón sabrosos e irresistibles

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Papas fritas con pimentón

Deliciosas y sabrosas, y también mucho más saludables que las que están en bolsas: aquí se explica cómo hacer hojas de papa en casa. Chips de pimentón sabrosos e irresistibles

Mucho más saludables que las de bolsa, pero igualmente apetitosas y sabrosas. Sí, podemos hacer las patatas fritas en casa . Y también condimentarlos como más nos guste. ¡No frito, por favor! Único horno para nuestras patatas fritas caseras, que hoy elegimos con pimentón.

¿El secreto? Corta las patatas en rodajas finas , para que queden lo más crujientes posible. Pero si lo preferimos, podemos cortarlos más gruesos, tal vez con un cuchillo ondulado, y aumentar el componente “rústico”, solo aumenta un poco el tiempo de cocción también.

Con mucha menos culpa, estamos listos para probar los bocadillos de papa. Que son ideales no sólo delante del televisor, como un aperitivo y aperitivo , sino también como un plato de invitación lado, incluso para comidas y cenas importantes. Pruébelos, por ejemplo, como acompañamiento de una ternera asada, salmón al horno o un pastel de carne vegetariano. Los niños estarán encantados, pero los adultos no se quedarán atrás. Y luego: un chip lleva a otro ...

Si te gustan las patatas, prueba la receta de patatas crujientes en sartén, croquetas de patata o patatas rellenas de verduras y queso. ¡A ti la elección!

  • Rendimiento: 6 personas atendidas
  • Dificultad: Fácil
  • Preparación: 10 minutos
  • Cocinar: 30 minutos

Ingredientes

  • 6 papas medianas-grandes
  • pimentón dulce o fuerte
  • Sal y pimienta para probar
  • aceite de oliva virgen extra al gusto
  • ajo unos dientes (al gusto)

Preparación

  1. Lavamos y pelamos las patatas. Córtalos en rodajas finas: 2-3 milímetros, para que queden crujientes.
  2. Engrasamos una bandeja para horno con aceite de oliva y colocamos las rodajas de patata encima, una al lado de la otra.
  3. Le echamos la sal y el pimentón, sin exagerar. Podemos añadir un poco de pimienta y unos dientes de ajo, al gusto. Ayudemos con nuestras manos a rociar.
  4. Vertimos un chorrito de aceite para conseguir el máximo crujiente, y cocinamos en un horno precalentado a 180-200 grados durante media hora, y en todo caso hasta que estén doradas. ¡Nuestras patatas rústicas con pimentón están listas!