3 pasos en falso que no debes tomar al comienzo de una relación

¿Cuáles son los errores que corren el riesgo de arruinar una relación amorosa después de unos meses? ¿Cómo puedes evitarlos? Aquí hay un breve vademécum

3 pasos en falso que no debes tomar al comienzo de una relación

¿Cuáles son los errores que corren el riesgo de arruinar una relación amorosa después de unos meses? ¿Cómo puedes evitarlos? Aquí hay un breve vademécum.

Los primeros meses de una historia de amor son los más delicados; hay quienes no se dejan ir por miedo y quienes corren con la esperanza de que la relación se caliente lo más rápido posible. Si una historia va más allá de este período, se asienta y comienza a estabilizarse, pero para llegar allí es necesario no cometer algunos errores que corren el riesgo de arruinarlo todo . Estos son los tres más comunes.

1. Tener miedo de discutir y arruinar la relación.

Es inevitable, sucederá. Lucharás y si lo haces bien saldrás más fuerte . La discusión en pareja es fisiológica y sirve para conocerse, crecer y encontrar caminos compartidos donde hay soluciones a los conflictos. Siempre temer la confrontación y vivir con el miedo de que termines no te ayudará a estar más preparado cuando esto suceda , solo te hará negativo y ansioso por la relación. Además, no disfrutarás de los momentos y eso, en última instancia, es lo que constituye una historia de amor.

2. Ten prisa y espera un te amo

Apretar el acelerador no hará que se enamore más rápido, sofocará a una persona, exigirá dedicación inmediata y expresar insatisfacción con lo que aún no se ha logrado solo alejará a la pareja. Una historia de amor florece con el tiempo, requiere atención, espacios para la individualidad, el respeto y la constancia; de lo contrario, después de la atracción física inicial, la magia no dura. Luchar porque aún no has recibido un ansiado "te amo" no te hará vivir mejor. Estas son palabras que no crean un sello indestructible en la relación y que solo si vienen de forma natural realmente calientan el corazón.

3. No muestres tus peores lados y finjas ser diferente

Este es otro error común debido a la inseguridad. Creemos que nunca nos gustará si somos demasiados introvertidos y hacemos alarde de una confianza que no nos pertenece, creemos que debemos vestirnos de una manera más sexy aunque seamos deportistas y desenfadados y nos condenamos a lucir lo mejor posible por la fuerza. No podemos fingir para siempre y, a la larga, comenzaremos a sufrirlo. Es inevitable, tarde o temprano detectaremos nuestro peor defecto y molestaremos al otro, pero ten la seguridad de que él hará lo mismo. Somos seres imperfectos y cuanto antes descubramos defectos en la pareja, antes entendemos si somos capaces de aceptarlos.