Desde Francia aquí hay un modelo de negocio verde y virtuoso. Nos referimos a la línea de electrodomésticos Cortocircuito , que es el resultado final de la idea concebida por el diseñador Gaspar Tinè-Berès.
Cafetera, tostadora, hervidores de varios tamaños , elaborados mediante el ensamblaje de viejos componentes electrónicos , arrojados en abundancia a vertederos, con envolturas de corcho natural , material conocido por sus propiedades impermeables, antibacterianas y aislantes.
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Por tanto, dispositivos eco-sostenibles, pero también económicos , ya que el reciclaje de componentes eléctricos ya ensamblados ha permitido reducir drásticamente los costes de producción: un concepto, este, muy importante y que diferencia sustancialmente el proyecto de muchos otros ecochics, que sostenible tal vez tengan poco.
Volviendo a poner en "circulación" lo que se había convertido en un residuo electrónico, con la línea Cortocircuito se resuelve el problema de larga data vinculado al impacto ambiental de las placas y circuitos, lamentablemente no desechables actualmente.