Cómo almacenar jengibre

Aquí tienes algunos consejos para guardar el jengibre en el frigorífico y el congelador, para tener siempre a mano una especia en particular con muchas virtudes beneficiosas.

Cómo almacenar jengibre

A continuación, te damos algunos consejos para guardar el jengibre en el frigorífico y el congelador, para tener siempre a mano una especia en particular con muchas virtudes beneficiosas.

La mayoría de vosotros habréis pasado por comprar una raíz de jengibre y no haberla usado toda para la receta que decidisteis preparar (por ejemplo un batido detox o las típicas galletas de jengibre). El jengibre no se puede conservar por mucho tiempo, pero cuando está fresco debe usarse en poco tiempo para evitar que se pudra . A continuación te daré algunos consejos sobre cómo almacenar el jengibre, para que puedas reutilizarlo en cualquier ocasión.

Congelador

Una de las mejores formas de almacenar el jengibre es congelarlo . Te recomiendo que cortes la raíz de jengibre y la congeles en trozos pequeños o en porciones individuales. Después de pelar el jengibre, puedes rallarlo hasta obtener la pulpa, esta última debe cortarse en diferentes partes, en función de la cantidad que quieras utilizar. La pulpa de jengibre se puede colocar en una bolsa transparente para almacenar alimentos, antes de colocarla en el congelador.
Atención: a pesar de estar almacenado en el congelador, recomiendo usarlo dentro de un año.

Cuando decidas preparar las porciones de jengibre, puedes elaborar un extracto derivado de la pulpa con el que puedes hacer un jugo excelente para el organismo . Una panacea indicada para vencer las náuseas, estimular el intestino y combatir la tos y la flema: las propiedades beneficiosas del jengibre son de hecho muchas. Si tiene la intención de conservar este jugo, exprima toda la pulpa de jengibre y guarde el jugo en un tazón. Durante esta operación, es importante prestar atención a los ojos porque incluso una pequeña salpicadura podría causar ardor y enrojecimiento graves .

Vierta el jugo en una botella con tapón, para que el fuerte aroma no se disperse, y guárdelo en el frigorífico unos días después de lo cual se podrá beber. El extracto también se puede almacenar en el congelador, en la botella o, si es necesario, también en los contenedores utilizados para el hielo.

Refrigerador

Si prefieres no congelar el jengibre, puedes guardar la raíz dentro del papel de cocina o en una bolsa de papel para guardar en tu nevera . Cuando sea necesario utilizar la raíz, simplemente corte un trozo. De esta forma el jengibre se mantendrá fresco durante unos meses, pero ojo, te recomiendo que cambies el papel de vez en cuando para que siempre quede seco, de lo contrario la humedad que produce la pulpa podría hacer que la raíz se pudra, especialmente en la zona donde se encuentra se ha cortado la raíz y, por tanto, la pulpa está más expuesta. Otra solución de conservación en el refrigerador es moler o licuar la pulpa de jengibre y almacenarla en aceite en un frasco hermético dentro del refrigerador.

Obviamente puedes elegir la solución de almacenamiento que mejor se adapte al uso que harás de la raíz de jengibre y las cantidades que utilices.