Memorial Day: The Eichmann Show - El proceso del siglo en el cine

Los días 25, 26 y 27 de enero llega al cine para celebrar el Día del Recuerdo, la película que narra uno de los hechos más significativos del siglo XX: el juicio del feroz criminal nazi Adolf Eichmann

Memorial Day: The Eichmann Show - El proceso del siglo en el cine

Los días 25, 26 y 27 de enero llega al cine para celebrar el Día del Recuerdo, la película que narra uno de los hechos más significativos del siglo XX: el juicio del feroz criminal nazi Adolf Eichmann.

El espectáculo de Eichmann - Eva (ZORA BISHOP), Milton (MARTIN FREEMAN) - Feelgood Fiction

El Show de Eichmann -Eichmann (VAIDOTAS MARTINAITIS) -

The Eichmann Show - Esposa del periodista del New York Times (NELL MOONEY), Corresponsal del New York Times (IAN PORTER) - (C)

El show de Eichmann - Martin Freeman y Anthony LaPaglia

El show de Eichmann - Roy (DYLAN EDWARDS), Milton (MARTIN FREEMAN), Leo (ANTHONY LAPAGLIA), Ron (BEN ADDIS)

El show de Eichmann - Leo (ANTHONY LAPAGLIA)

Los días 25, 26 y 27 de enero llega al cine para celebrar el Día del Recuerdo, la película que narra uno de los hechos más significativos del siglo XX: el juicio del feroz criminal nazi Adolf Eichmann. La película de Paul Andrew Williams, protagonizada por Martin Freeman y Anthony LaPaglia , estará a la vista durante unos días, como suele ser el caso de obras de taquilla artísticamente excelentes pero menos gratificantes.

The Eichmann Show - El manifiesto de Eichmann Show narra un momento histórico lleno de gran valor político, cultural y moral: en la Jerusalén de 1961 el productor de televisión Milton Fruchtman (Martin Freeman, Doctor Watson en Sherlock de la BBC) contrata al director Leo Hurwitz ( Anthony LaPaglia, conocido por la serie de televisión Without a Trace), el mejor documentalista de la plaza, terminó en la lista negra de McCarthy por actividades antiamericanas; Hurwitz tendrá que hacerse cargo del metraje televisivo del juicio del criminal nazi Adolf Eichmann, captado en Argentina por los servicios secretos israelíes. Es una obra de dimensiones de época: por primera vez en la historia se habría retransmitido un juicio por televisión y por primera vez el mundo entero habría sido testigo de los testimonios de los supervivientes del Holocausto en un evento televisivo mundial .

El “Juicio del Siglo” o el Nuremberg de Israel, con el horror de los campos de exterminio contado por testigos oculares sobrevivientes, está documentado en vivo; Cada día, el material filmado por Hurwitz sale de Jerusalén para su distribución en 37 países, donde se transmite al día siguiente.

La realización de estos documentales es una historia poco conocida y The Eichmann Show, producido por FeelGood Fiction, lo hace emocionante: el proyecto fue apoyado por el propio Ben Gurion, pero Fruchtman y Hurwitz deben encontrar una estratagema para convencer a los jueces de que acepten la presencia del cámaras en el aula y superar todo tipo de dificultades prácticas y emocionales.

El resultado de esta operación mediática fue que el 80% de la población alemana veía al menos una hora del programa cada semana, que se transmitía en todas las redes, incluso en Estados Unidos y Gran Bretaña .

Leo Hurwitz lideró la dirección tratando de captar un defecto y un matiz de humanidad en la máscara impasible de Eichmann, sin encontrar ningún signo de remordimiento o pesar ante las atrocidades ordenadas por uno de los principales planificadores del exterminio de los judíos.

La brillante visión de Milton Fruchtman, convencida de la importancia de transmitir el evento tanto en Israel como en el resto del mundo, finalmente permitió, 16 años después del final de la guerra, hablar abiertamente sobre el Holocausto y dio voz a los sobrevivientes para decir qué eso había sucedido, ya no tenía miedo de que no le creyeran.

El Show de Eichmann, a pesar de la profundidad de la temática, está dirigido de manera fluida, introduciendo las partes documentales de manera estratégica y certera que se integran perfectamente en la película; los 88 minutos del espectáculo están cubiertos por una sensación de patetismo sobrio, sin sentimentalismos fáciles; un hilo de ironía caracteriza tanto la dirección de Paul Andrew Williams como la extraordinaria actuación de Martin Freeman y Anthony LaPaglia.

Como en 1961 los autores estaban convencidos de que el proceso "tenía que ser visto", así hoy The Eichmann Show es una película que debe proyectarse, no solo por su contenido histórico sino también por sus ecos de temible actualidad.