Focaccia dulce
La focaccia dulce es ideal para un bocadillo sabroso o para un desayuno energético: ¡simple y rápido de preparar, atraerá a grandes y pequeños!
Solemos pensar en la focaccia como una preparación salada , típica de varias zonas de Italia, en particular de Liguria. ¡En realidad también está la dulce focaccia !
Las variantes
La clásica focaccia dulce es la que tiene azúcar caramelizada en la superficie . Pero una vez que hayas aprendido la receta básica de la focaccia dulce, puedes decidir disfrutarla como más te guste: rellena de crema de avellanas , o en una versión más ligera, con pasas , por ejemplo. Para los golosos, se puede rellenar con trozos de manzana o fresa o con chispas de chocolate .
Los origenes
La focaccia dulce tiene origen piamontés y, precisamente, alejandrino. Es una focaccia parecida a la genovesa, pero cubierta de azúcar que al cocinarse en el horno se vuelve ligeramente crujiente y caramelizada. Esta preparación es una de las comidas callejeras clásicas de Alessandria y típica de los desayunos de muchas familias: solo se puede encontrar en Alessandria y sus alrededores. Como todas las focaccias, hasta la dulce alejandrina nació como una receta pobre , preparada con unos pocos ingredientes siempre disponibles en casa . La receta utiliza levadura de cerveza en polvo , pero también se puede utilizar levadura fresca o, mejor aún, levadura madre.. Es muy sencillo de preparar: requiere pocos ingredientes para un resultado delicioso.
La historia de la focaccia
Los orígenes de la focaccia son muy antiguos; existen ya algunos testimonios del consumo de focaccia entre fenicios, cartagineses y griegos. En la antigua Roma, las focaccias se ofrecían a los dioses, mientras que en el Renacimiento se consumían con vino en los banquetes de bodas . Como el pan, pero más rico debido a la grasa (aceite o manteca), la focaccia siempre ha sido particularmente popular en Italia. Alimento para viajeros y pescadores, la focaccia aparentemente debe su nacimiento también a los largos tiempos de espera que debían afrontar los panaderos durante sus noches de trabajo. Para pasar el tiempo, horneaban trozos de masa sin levadura directamente sobre la base del horno , que una vez cocidos se comían rellenos de verduras, carnes o quesos.
- Rendimiento: una sartén
- Dificultad: Fácil
- Preparación: 15 minutos
- Cocinar: 15 minutos
Ingredientes
- 450 gr de harina 00
- 120 gr de azúcar granulada
- 1 sobre de levadura seca
- agua tibia
- leche tibia
- aceite de semilla
- sal
- agua
- 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
Preparación
- En un bol grande vierte la harina, 2 cucharadas de azúcar (reserva 100 g para la cobertura), una cucharadita de sal, levadura y agua tibia.
Revuelva con una cuchara de madera, agregue la leche y continúe mezclando a mano, hasta que la masa sea elástica pero lo suficientemente suave.- Deje que la masa suba, cubierta con un paño, durante una hora en un lugar cálido.
- Pasada una hora, esparce la masa con las manos sobre la bandeja de horno, cubierta con papel de horno engrasado con un poco de aceite de semillas.
- Mientras extiende la masa, haga con los dedos los clásicos 'agujeros' de focaccia, que luego se cubrirán con azúcar.
- Una vez untado, mezclar medio vaso de agua con 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra y verter este líquido sobre la focaccia, repartiéndola bien con las manos: debe formarse un poco de agua, que se secará durante la cocción.
- Distribuya el azúcar uniformemente sobre toda la focaccia y hornee a 200-250 ° en un horno ventilado durante 15-20 minutos.
- Retirar la focaccia del horno y dejar enfriar antes de cortar y servir.