Duraznos en almíbar
Dulces y jugosos, los melocotones en almíbar son excelentes para comer solos, pero también con helado o en postres de cuchara como la panna cotta.
El melocotón en almíbar es un verdadero clásico de la cocina italiana, suave, jugoso y dulce. Se pueden degustar de muchas formas diferentes y tienen un aroma único que le da a cada postre un toque especial. Puedes comerlos junto con helado de vainilla o nata, acompañarlo de una rica crema de chocolate o utilizarlos para preparar una excelente panna cotta o una deliciosa tarta de frutas.
El color, el aroma y el sabor de los melocotones en almíbar pueden hacer que cada postre sea especial, especialmente durante el verano, cuando queremos un postre sabroso, pero también fresco y ligero. Los melocotones extra en almíbar son muy fáciles de preparar, solo unos melocotones maduros, un poco de azúcar y agua. Se preparan en poco tiempo y hacen las delicias de grandes y pequeños. Puedes comerlos como botana, pero también servirlos después de una buena comida, acompañados de un poco de grappa para hacerlos digestivos.
Un consejo: para preparar melocotones en almíbar, elija melocotones de pulpa amarilla , que estén maduros, pero también firmes y fragantes. También asegúrate, si puedes, que tus duraznos sean orgánicos y no estén tratados con pesticidas, así estarás seguro de consumir un producto que no solo sea bueno, sino también saludable. De esta manera obtendrás melocotones realmente deliciosos, suaves y jugosos, con un color amarillo brillante.
Puedes comerlos inmediatamente después de prepararlos, pero lo mejor es consumirlos después de unos quince días. Esto se debe a que después de dos semanas los duraznos habrán absorbido el almíbar y el sabor de los dos ingredientes se habrá derretido creando una conserva única.
- Rendimiento: 4 botes de 250 ml
- Dificultad: Fácil
- Preparación: 20 minutos
- Cocinar: 30 minutos
- Cocina: italiana
Ingredientes
- 1 kilo de melocotones
- 400 gramos de azúcar
- 1 litro de agua
Preparación
- Primero lava bien los duraznos, luego cocínalos en una sartén con abundante agua caliente durante 2 minutos.
- Una vez blanqueados, sácalos de la olla, déjalos escurrir y pásalos por agua fría.
- Pelarlos y cortarlos por la mitad quitando el corazón. Por último, coloca los melocotones en los frascos de vidrio que habrás esterilizado primero.
- Mientras tanto, prepare el almíbar vertiendo el agua y el azúcar en una cacerola.
- Hervir hasta que el azúcar se haya disuelto por completo y, cuando esté listo, verter el almíbar en los frascos que cubren los duraznos.
- Cierre los frascos, asegurándose de que no haya burbujas de aire, luego hiérvalos en una olla con abundante agua durante unos 20 minutos.
- Cuando los melocotones en almíbar estén listos, colócalos en un lugar seco y oscuro, consumiéndolos después de al menos 15 días.